Bad News Barrett venció a Big E para convertirse en el nuevo Intercontinental Champion en WWE Extreme Rules 2014


Después de superar a algunas de las mejores superestrellas de la WWE en un torneo para determinar al aspirante número 1 al Campeonato Intercontinental, Bad News Barrett se olvidó de los discursos y derrotó al enorme Big E en Extreme Rules para conquistar el prestigioso título por cuarta vez en su carrera.

Barrett, uno de los mejores luchadores en la historia reciente de la WWE, derrotó a excampeones del mundo como Dolph Ziggler, Sheamus y Rob Van Dam para ganarse la oportunidad de luchar contra Big E en Extreme Rules. Después de sus habituales "malas noticias", Barrett sumó a su causa a muchos de la aficionados de Nueva Jersey que estaban presenciando el combate.

Cuando la pelea se puso en marcha, era obvio que los diferentes estilos de Barrett y Big E provocarían un duelo competitivo digno de la lucha por un campeonato que a lo largo de la historia han conquistado hombres de la talla de "Mr. Perfect" Curt Hennig o The Ultimate Warrior. La potencia y agilidad del monstruoso campeón fue igualada por el estilo poco ortodoxo y basado en la pelea pura por parte de Barrett.

La capacidad de recuperación de ambas superestrellas también fue extraordinario y necesario en un combate de ida y vuelta constante. El británico y el campeón intercambiaron golpes mientras la acción se salía incluso fuera del ring. Pero lo más impresionante de ambos luchadores era su capacidad para mantenerse en la pelea y escapar de los intentos de 'pinfall' de su enemigo y de patadas directas a sus respectivas cabezas.

La batalla por el Campeonato Intercontinental se prolongó con los aficionados pegados a sus asientos pero, a última hora, Big E se comió el famoso 'Bull Hammer Elbow' de su enemigo en su segundo intento y ya no iba a poder escapar de sus garras.

Barret logró el 'pinfall' que le daba el título, arrebatando a Big E un cinturón que ha tenido amarrado a su cintura durante casi un año. La victoria del británico fue sin duda una buena noticia para él, pero la pregunta sigue siendo: ¿Cuánto pueden durar las buenas noticias a su favor?.