A pesar de un calculado ataque previo al combate por parte de Alberto del Río, Batista rugió de nuevo en la Cámara de Eliminación para vencer a su astuto rival y puso su mirada en el evento principal de WrestleMania 30.
Mientras Batista llegó a Minneapolis preparado para dar a Del Río una lección que nunca olvidaría, La Esencia de la Excelencia tenía otros planes. Vestido con un collarín ortopédico y ayudándose de una muleta, el cuatro veces campeón del mundo salió al ring para declarar que el ataque del Animal hace dos semanas le había dejado incapaz de competir.
Sin embargo, la salud de Del Río pareció mejorar a toda prisa cuando el aspirante número 1 al WWE World Heavyweight Championship le dio la espalda para discutir con el árbitro. En ese momento, el mexicano atacó brutalmente a Batista con la muleta y después se quitó la ropa de calle para mostrar sus mallas, botas y su intención de competir.
Sin embargo, ése fue casi el final de la historia. Cuando el orden del árbitro se restauró, un Batista casi cojo optó por ir a por todas contra Del Río. Aunque su enfurecido enemigo continuó su ataque, la determinación del Animal terminaría por darle una gran victoria cuando la cabeza de Del Río se estrelló contra un torniquete expuesto del ring, permitiendo a Batista acabar con él con una estruendosa Bomba de Batista.
Con Alberto del Río fuera del camino, Batista continuará trabajando camino de WrestleMania XXX, dispuesto a chocar de frente con el Campeón de Campeones de la WWE en el mayor evento del año. Aún así, el mexicano le ha hecho un daño notable tanto en la rodilla como en el brazo, por lo que habrá que esperar a ver la evolución del Animal en las próximas semanas.
