John Cena ganó la WWE World Heavyweight Championship Ladder Match en WWE Money in the Bank 2014


El campeón es... bueno, ya sabes. Con los restos de Cesaro, Bray Wyatt, Roman Reigns, Alberto del Rio, Sheamus, Kane y una ensangrentado Randy Orton rodeándole, John Cena subió la escalera y obtuvo la última victoria y, potencialmente, la más grande de su historia para conquistar el WWE World Heavyweight Championship en el primer Ladder Match que puso en juego los títulos unificados.

Y eso que Triple H y Stephanie McMahon estaban en primera fila para presenciar el triunfo final del ex-Marine, lo que debe haber sido sólo la cereza del pastel para él. Cuando los dos títulos mundiales se unificaron en TLC en diciembre de 2013, Cena no estaba en el sitio adecuado. Sin embargo, de toda su lista de triunfos, éste puede considerarse particularmente impresionante, dado que La Autoridad no sólo tenía a uno, sino a dos representantes en la pelea: Kane y Randy Orton.

La pelea que finalmente vio coronarse a Cena como el Campeón de Campeones no tomó el ambiente caótico del primer Ladder Match de la noche, donde se vieron cuerpos volando desde el primer momento. En cambio, las ocho superestrellas del evento principal de la noche se emparejaron al principio con sus más recientes rivales, por lo que Cena se las vio con Bray Wyatt y Cesaro, y tuvo que lidiar con Del Río por el control de una escalera. Sin embargo, todo se convirtió en un caos inmediatamente cuando Bray arrojó su cuerpo sobre dicha escalera, llevándose por delante tanto al Rey del Swing como a la Esencia de la Excelencia de un solo golpe.

Sheamus se convirtió en el primer hombre que puso las manos sobre los dos títulos, aunque Kane rápidamente despejó el camino para que Orton subiera por los peldaños de la gloria. Roman Reigns contestó rápidamente, tirando a La Víbora a mitad de la escalera. Para colmo de males, Orton se llevó un golpe en la cabeza en su camino hacia el suelo, quedando ensangrentado en el exterior.

Sin embargo, el ex-Campeón de Campeones se recuperó milagrosamente rápido, reafirmándose a sí mismo al atacar a Cesaro primero y a Sheamus después. Después de deshacerse tanto de Alberto del Rio como del el irlandés en el exterior, La Víbora intentó de nuevo hacerse con los títulos, pero por desgracia para él, el ring se llenó en cuestión de momentos y fue imposible agarrar los cinturones.

Una vez más, Kane demostró ser el activo más valioso de La Autoridad al limpiar el ring, pero el Demonio favorito del Diablo topó con Sheamus antes de que pudiera ayudar a Orton. Kane sufrió los Diez golpes del Bodhran por sus esfuerzos, aunque el dominio del irlandés duró poco y pronto fue el turno de Cesaro para hacer otro intento de conquistar los títulos. El Rey del Swing se mostró digno de ser representado por Paul Heyman al colocar una escalera desde el tensor del ring y colocarlo de una manera que creó un marco de acero (ingeniería suiza en su máxima expresión) por el que alcanzar su objetivo.

Ante lo cual, por supuesto, Roman Reigns no vio más que una solución: destrozarlo todo.

Con la casa de escaleras, literalmente, al borde del colapso, Cesaro y Sheamus intercambiaron golpes al lado de los títulos hasta que Cena enderezó, literalmente, la nave... y en ese momento Kane, una vez más, se llevó por delante a toda la oposición. Reigns desató su mayor esfuerzo en este punto, lanzando su cuerpo por debajo de los peldaños para partir a Kane en dos con un 'spear', a lo que siguieron varios puñetazos de Superman que limpiaron el ring de enemigos... a excepción de John Cena, que se encontró cara a cara con el ex de The Shield, un ring vacío y unos aficionados deseosos de wrestling del bueno.

El primer cara a cara entre el presente y el futuros de la WWE terminó con ventaja para Reigns, que se liberó del Ajuste de Actitud y rebotó contra las cuerdas para ejecutar un 'spear' perfecto. Sin embargo, el destino aparentemente predestinado de Roman para subir la escalera se retrasó una vez más, esta vez por culpa de Orton, quien arrancó al rebelde de los peldaños con un rompe-espaldas.

Fue en este punto, sin embargo, cuando cada superestrella decidió hacer sus apuesta decisiva por la victoria. En primer lugar, Wyatt irrumpió en el ring y tumbó a Orton con la Hermana Abigail; después, Del Río le detuvo momentos después con una patada directa a la cara y fue cazado momentos más tarde por Sheamus, quien licenció al mexicano con una 'Brogue Kicked' que acabó con sus aspiraciones. El propio intento de Sheamus para subir la escalera se truncó por parte de Cesaro, quien lo tumbó de un 'uppercut a la Europea' antes de que Orton tirara al suizo de la escalera con un RKO.

La Víbora subió la escalera una vez más y Reigns hizo su última jugada cortando el camino a su rival. Por un momento, parecía que el excampeón por equipos iba a cumplir su promesa de convertirse en el nuevo Campeón de Campeones tras noquear a Orton, pero Kane demostró una vez más que es digno de la confianza de La Autoridad cuando quitó a Reigns de su camino con un impresionante 'Chokeslam'.

Fue entonces cuando Cena aprovechó la oportunidad que el destino le había presentado. Con Kane y Orton solos en el ring, el ex-Marine hizo su jugada. En primer lugar, ejecutó un Ajuste de Actitud al Gran Monstruo Rojo desprevenido y luego lanzó su maniobra marca de la casa sobre Orton, golpeando a la Víbora contra el cuerpo tendido de Kane por si acaso antes de subir las escaleras y desenganchar el WWE World Heavyweight Championship para lograr su 15º título mundial.

La reacción que se desató en el ring no era ni mucho menos de fiesta: Triple H, que había amañado las probabilidades de todas las maneras imaginables, casi se arrancó la corbata como frustración. La mandíbula de Stephanie McMahon casi cayó al suelo mientras John Cena subía a los tensores del ring con los dos títulos en la mano, el resultado que La Autoridad había intentando evitar durante todos esos meses a base de duro trabajo. Les guste o no... El campeón está aquí.