A veces se necesita algo más que carisma y un poco de magia negra para dominar al Universo. Y a veces se necesita algo más que simples trucos de salón para vencer a John Cena. Sin embargo, en Extreme Rules, Bray Wyatt consiguió hacer las dos cosas: continuó con el encanto de las masas y venció al ex-Marine en un brutal combate en una jaula de acero.
Con Luke Harper y Erick Rowan fuera de la estructura de acero y acechando desde el exterior, el 14 veces campeón del mundo se enfrentó cara a cara con la nueva cara del miedo en el interior de la jaula. Y, aunque la estructura sirvió como barricada para mantener a los discípulos de Wyatt alejados, Harper y Rowan hicieron todo lo que pudieron para evitar que John Cena escapara.
Wyatt se mostró previsiblemente brutal en los primeros compases de la pelea y, con su enemigo en la lona, el Devorador de Mundos actuó como director de orquesta con el Universo de la WWE, ya que se lanzó a una extraña interpretación de "Él tiene el mundo entero en sus manos".
Sin embargo, como lo ha hecho a lo largo de su ilustre carrera, Cena encontró la manera de levantarse de la lona y subió directamente a la parte superior de la jaula. Sin embargo, con Harper y Rowan siempre presentes, la fuga parecía casi imposible. Con un Cena maltrecho y lastimado de sus brazos, Wyatt bailaba por todo el ring con su enemigo cojo, balanceándose hacia adelante y atrás con una canción que sólo él podía oír.
La paliza continuó para Cena y Wyatt parecía estar simplemente jugando con su presa, lanzando al ex-Marine contra el acero una y otra vez. Pero Cena iba encontrando aire y se recuperaba y la cuestión pronto se convirtió en si Bray estaba atrapado en el interior de una jaula con un ex-Marine cada vez más agresivo. Después de un 'powerbomb' que hizo temblar el ring, John Cena parecía estar en una posición privilegiada para salir por la puerta y hacerse directamente con la victoria.
Pero Harper y Rowan mantuvieron a Cena dentro y le lanzaron de nuevo a los brazos de Bray Wyatt. Nuevamente Cena se defendió y puso a Bray en su sitio, pero esta vez fue Rowan quien detuvo el descenso del ex-Marine fuera de la jaula.
Después de un enorme 'bulldog' desde la tercera cuerda, Cena subió de nuevo a la cima, sólo para ser recibido por Harper. Esta vez, sin embargo, el 14 veces campeón del mundo lanzó a Harper dentro de la estructura con él y le tumbó sobre la lona junto a Bray. Pero Rowan mandó a Cena de vuelta al ring y Wyatt se aprovechó ejecutando a la hermana Abigail. John fue capaz de contrarrestar la maniobra y transformarla en un STF insoportable, pero Wyatt se las arregló para salir del paso y ahora tenía un aliado dentro de la jaula, al contar con Luke Harper junto a él.
Incluso un impresionante Ajuste de Actitud desde la tercera cuerda sobre Wyatt no sirvió para nada, ya que Harper acabó con el intento de cuenta de tres. Con monstruos dentro y fuera del ring, Cena y Rowan se reunieron en la parte superior de la jaula, donde Cena atizó al gigante antes de también tumbar a Harper.
Entonces, con los tres miembros de la Familia Wyatt tumbados sobre la lona, Cena tenía no sólo tenía la victoria a la vista, sino también la oportunidad de abandonar literalmente a los Wyatt dentro de la jaula de acero. Sin embargo, cuando subía por las cuerdas para salir por la puerta, las luces del pabellón se apagaron y un niño apareció junto al ring, cantando inquietantemente la retorcida canción de Bray Wyatt con una voz extrañamente distorsionada.
Un Cena aturdido dio un paso atrás y terminó en el ring, donde fue recibido con una rápida y devastadora hermana Abigail por parte de Bray Wyatt, quien procedió a subir a través de las cuerdas y bajar las escaleras hasta el suelo para hacerse con una victoria inquietante.
Aunque se puede decir que, incluso en la derrota, Cena se mantuvo fiel a sí mismo, el dominio de Wyatt sobre las masas sólo creció en el transcurso de esta batalla del bien contra el mal. La imagen de la Familia Wyatt caminando de la mano con un niño invisible permanecerá en la mente colectiva de los seguidores de la WWE durante mucho, mucho tiempo.
