Roman Reigns ganó el Royal Rumble Match en WWE Royal Rumble 2015
De todos los momentos memorables que sucedieron en los minutos finales del Royal Rumble 2015, ninguno perdurará en la memoria del Universo de WWE más que la imagen de Roman Reings lastimado y con la cara ensangrentada. Esas heridas de guerra son un símbolo del infierno que Reigns atravesó para ser el último sobreviviente en Filadelfia. Queda como recordatorio de que su victoria fue ganada con sudor.
Si Reigns parecía demolido, fue porque Kane, Big Show y Rusev se atravesaron en su camino a la victoria. Los gigantes de La Autoridad le habría puesto fin a sus planes para WrestleMania si no hubiera sido por la ayuda que recibió de The Rock. Pero vamos con calma con esto.
Una hora antes de que se desatara el infierno en el Wells Fargo Center, fue The Miz el primero en entrar, seguido de su ex compañero de equipo R-Truth. Después de un breve intercambio de golpes, el público de Filadelfia recibió al primer invitado sorpresa, cuando el veterano de ECW, Bubba Ray Dudley, se convirtió en la tercera Superestrella en el Rumble. Compitiendo por primera vez en este tipo de encuentro, Dudley inmediatamente de puso a limpiar la casa, e incluso puso a Truth a sustituir a su legendario compañero, D-Von, para sacar a The Miz del ring.
Dudley fue sorprendentemente efectivo en el encuentro, sobre todo considerando su ausencia de 10 años de la WWE, pero se encontró superado por Bray Wyatt y Luke Harper, quienes se aliaron en su contra. La reunión de la Familia Wyatt se volvió incómoda cuando Erick Rowan, quien no estaba calificado para el Rumble, atacó al No. 6 Curtis Axel y robó su lugar en el encuentro. Rowan tuvo un intercambio de palabras con sus ex compañeros, antes de ser arrojado hacia fuera, de lado de Harper, por el Devorador de Mundos.
El séptimo lugar ofreció otro espanto al Universo de WWE, cuando el bizarro Boogeyman regresó a la WWE y se enfrentó al igualmente inusual Wyatt en el ring. Sin embargo, el veterano no le duró ni para la botana al merodeador del pantano.
Wyatt estuvo en control del encuentro a partir de ahí, librándose rápidamente de Sin Cara y de Zack Ryder son mínimo esfuerzo. En cierto momento, Wyatt estaba tan confiado que agarró el micrófono para advertir al vestidor WWE que “¡este es el año de Bray Wyatt!”
Los cosas se pusieron serias cuando Daniel Bryan – cuya ausencia en el Royal Rumble del año pasado casi causa revueltas en el Universo WWE – entró en el lugar No. 10 y procedió a hacer lo que hace mejor, que es patearle el trasero a la gente. Si Wyatt tiene problemas para caminar mañana, puede agradecérselo a las patadas de Bryan.
El ring se llenó con Fandango, Tyson Kidd, Stardust y Diamond Dallas Page, como tercera sorpresa de la noche. El 14º competidor golpeó a Stardust con su Diamond Cutter y le hizo lo mismo a Fandango y Wyatt. Page salió de la fiesta gracias al No. 16, Rusev, quien inmediatamente sacó al ex Campeón WCW y a Fandango el ring. A partir de entonces, el Súper Atleta dominó el encuentro.
La mayor decepción de la noche vino cuando Bryan fue eliminado por Wyatt. Aunque Kofi Kingston continuó con su racha de salvadas milagrosas en el Royal Rumble, incluyendo un aterrizaje sobre los Capullos de Rosa de Adam Rose, quienes lo volvieron a colocar a salvo en el cuadrilátero, el ambiente de descontento era palpable dentro del Wells Fargo Center.
En el lugar 19 vino el favorito Roman Reigns, quien se libró de Gold & Stardust a pocos segundos de haber subido al ring. El público demostró su apoyo al No. 21 Damien Mizdow, quien entró a la refriega a pesar de que Miz intentó robarle su lugar. Mizdow mostró gran garra antes de ser eliminado por Rusev.
Si el notablemente duro público de Filadelfia tenía un favorito después de Daniel Bryan, ese sin duda fue Dean Ambrose, quien vino en el número 25. El Lunático se alió a su amigo Reigns para arrojar a Titus O’Neil en cuatro segundos.
Las eliminaciones comenzaron a detenerse cuando pesos completos como Ryback, Cesaro y Kane tuvieron su turno de entrar. El límite de peso del ring fue puesto a prueba cuando Big Show apareció con el número 29. Claramente coludidos en algún diabólico plan de La Autoridad, el Atleta Más Grande del Mundo y el Director de Operaciones se unieron para sacar a quien se les pusiera en frente.
El último en entrar fue Dolph Ziggler, quien lanzó hacia el piso a Bad News Barrett con una súper patada, antes de subirse al Swing de Cesaro. Tras aferrarse a las cuerdas, el Presumido se libró del suizo, consiguiendo su segunda eliminación. Sin embargo, su suerte se terminó cuando fue noqueado por Big Show y arrojado hacia fuera por Kane. Con eso, el Demonio Favorito del Diablo rompió el récord de Shawn Michaels para convertirse en la Superestrella con más eliminaciones en la historia del Royal Rumble; 42 en total.
Las últimas cuatro Superestrellas tomaron sus lugares dentro del ring, mientras los gigantes de La Autoridad se median ante Ambrose y Reigns. Los ex Shields estaban claramente exhaustos, por lo que Show y Kane rápidamente se libraron de Ambrose. Reigns casi sufrió el mismo destino, pero sus oponentes tuvieron una discusión. Los agresores comenzaron a intercambiar golpes y se agarraron mutuamente de la garganta, lo que le permitió a Reigns levantaros a ambos y sacarlos por encima de la tercera cuerda.
Un año después de romper el récord de más eliminaciones en un Rumble, Reigns ganó el encuentro para ir a WrestleMania. Sin embargo, no hubo celebración, ya que Big Show y Kane regresaron al ring para castigarlo con un Agarre Infernal doble. No obstante, antes que pudieran hacerle daño, tres conocidas palabras resonaron por toda la arena: “If you smell!!!”
Segundos más tarde, La Roca llegó corriendo al ring. Mientras el Universo WWE se regodeaba en júbilo, el Grandioso ponía sus manos sobre los villanos, e incluso golpeó a Kane con el Codo del Pueblo. Fue un emocionante fin para el encuentro, hasta que nos dimos cuenta de que, en efecto, no había terminado.
Rusev – quien había salido del ring sin pasar sobre la tercera cuerda – subió y atacó al vulnerable Reigns. La ágil Superestrella evitó el ataque, rebotó en las cuerdas y golpeó al ruso con una poderosa Lanza. Segundos después, Rusev estaba en el piso y Reigns era el vencedor oficial del Royal Rumble 2015.
Triple H y Stephanie McMahon salieron por la rampa para mirar con ceño al ganador, pero él apenas se percató de su presencia. Más bien, puso su mirada en el logo de WrestleMania 31 que colgaba en las vigas del Wells Fargo Center, La Roca, que levantaba su brazo en señal de victoria, y la Bestia Encarnada, que aguarda en las sombras.