Bray Wyatt venció a Dean Ambrose por descalificación en WWE Survivor Series 2014


A primera vista, no hay competidores más diferentes que Dean Ambrose y Bray Wyatt, pero después de ver la brutalidad en St. Louis, nadie puede negar las semejanzas. Inestable, desquiciado e impredecible, Ambrose exhibió su estilo de pelea maniaco y frenético. Pero Wyatt, frío como un pepino por fuera, igualó a su oponente golpe por golpe.

Los primeros minutos de la riña de alto impacto estuvo entre las cuerdas, en el piso de la arena, de regreso a la lona y afuera de nuevo. Como uno de los sermones de Bray, era difícil saber a donde irían luego. Pero cuando Bray se aprovechó de un desatinado clavado de Ambrose hacia fuera, el predicador del pantano logró obtener el control.

Wyatt empujó a su oponente hacia el ring, donde le aplicó una agonizante Llave Nelson. Dean forcejeó y logró zafarse, pero volvió a ser golpeado por Wyatt luego de una colisión a alta velocidad. Sintiendo los efectos, ambos hombres cayeron afuera del ring después de un lazo doble. Justo cuando iban a perder por conteo, ambos entraron por debajo de la primera cuerda.

Ambrose golpeó a su rival y en ese momento se puso un paso adelante de su retorcido rival. El Lunático – quien hasta ese momento había dejado que Bray entrara en su mente – estaba ahora en la de Wyatt. Imitando al barbón, se colgó boca abajo desde los tensores. Fue un momento asustador para Wyatt, quien usualmente es el cazador.

Sorprendido, Bray intentó llamar a la Hermana Abigail, pero Ambrose respondió inmovilizándolo, pero Wyatt escapó. Fue el inicio de una larga serie de maniobras y contraataques donde ambos tuvieron sus momentos. Por un instante, parecía que el combate continuaría sin un claro vencedor.

Finalmente, el Lunático logró darle un lazo y un codazo desde la tercera cuerda a Wyatt. Pero cuando Bray logró aplicar él mismo otro lazo, lo siguió con un slam en las escaleras de acero afuera. De alguna manera, Dean logró escapar del conteo de 3, dejando a Wyatt anonadado.

Desesperado, el ofensor comenzó a preguntarse qué debería hacer para derrotar a Ambrose. Salió del ring para agarrar su arma favorita: un micrófono.

"¿Por qué haces esto, hombre?" preguntó Wyatt. "No tenía que ser así, Dean".

Wyatt, preguntándose en qué se había metido, comenzó a darse cuenta de que quizás había mordido más de lo que podía masticar. Porque, al final, Ambrose es tan salvaje como él.

"Tu y yo, éramos especiales", reveló, pero luego dijo algo todavía más ominoso: "lo siento, elegiste tu camino".

Wyatt sacó una silla de debajo del ring y la lanzó al ring, donde Ambrose la agarró rápidamente. Bray lo retó a golpearlo. Dean lo contempló por un momento, dejando que la furia se notara en su rostro. Golpeó a Bray en las entrañar, luego en la espalda. Sin importarle que lo descalificaran, puso la silla en el piso y le aplicó el DDT a Bray sobre el acero.

Pero Ambrose no había terminado. Fue debajo del ring y sacó una mesa. Momentos después, hizo que su oponente la atravesara con un codazo desde la tercera cuerda. Como si de un Home Depot personal se tratara, Dean levantó de nuevo la falda del ring, encontrando docenas de sillas que lanzó al ring para enterrar a Wyatt en una pila de acero y madera

El Lunático fue al límite, pero luego, dio el tiro de gracia: una escalera. Subió a la cima, donde señaló que esta guerra no había terminado. Ambrose, en efecto, eligió su camino: una derrota por descalificación, un Wyatt brutalizado y una lucha en TLC el próximo mes.

Quizás Bray estaba en lo correcto. Él y Dean son especiales en lo que se refiere a su método de locura. Pero por fuera, no podrían ser más diferentes. En este caso, los opuestos se atraen.