El Héroe de la Federación Rusa enfrentó a su rival más duro en Hell in a Cell, el gigante de 2.14m y más de 200 kg., Big Show. La animosidad entre ambas Superestrellas llegó a punto de ebullición, con Show a punto de noquear al ruso. Sin embargo, el Súper Atleta sorprendió al Universo de WWE, sobrepasando al Goliat estadounidense y clamando otra victoria para la Madre Rusia por sumisión.
Enfurecido por la patada dada al soldado americano que intentaba proteger la bandera, Big Show entró a Hell in a Cell montando una ofensiva inmediata. No obstante, Rusev sobrevivió a la furia inicial, inteligentemente atacando las rodillas de Big Show, dejando al ex Campeón Mundial fuera de balance.
Dando más muestras de su poder, Rusev le hizo un suplex a Big Show con relativa facilidad. El Universo WWE en Dallas permaneció en silencio, atestiguando el sorprendente poder el luchador ruso. Sin embargo, el orgullo americano de Big Show lo hizo volver a la pelea – esfuerzo que llevó a Mark Henry a lado del ring para echarle porras al Atleta Más Grande del Mundo.
Rusev se mantuvo incondicional a su misión, derribando a su gigantesco oponente con otra devastadora patada, dosis que también le aplicó al Hombre Más Fuerte del Mundo. Después de desatar por completo su furia, Rusev pisoteó la espina de Big Show, se montó en el Accolade y forzó a su oponente a someterse.
